OS
DRUIDAS da NATUREZA
Grupo filosófico -naturista que ten a Natureza como
punto de referencia.
RECOMENDACIÓNS DUN
DECÁLAGO DRUIDA
1º.- Procurarás coidar e vivir na Natureza como
residencia universal compartida por todos os seres vivos da Terra.
2º.- Intentarás respetar a todos os homes e
mulleres como seres que forman parte do engranaxe armónico da existencia
sin diferenciación de raza, sexo, idade, relixión, ou creenza, procurando
como obexetivo acadar a “PAZ Universal”, facendo o Amor pero non a
Guerra.
3º.- Todas as sectas e relixións son antagónicas,
contradictorias, agresivas, destructivas entre sí e inventadas por as
mentes dos homes nas distintas épocas, culturas e rexións, polo que só
deberías confiar na lei Natural e na Natureza como norma universal e infalible
do comportamento a seguir. A “túa conciencia”
será o teu Código de Honor e a Asamblea admitirate uo ignorarate.
4.- Podes practicar o bautismo do rito Celta como
cirimonia de iniciación ó druidismo: dispoixa de realizar durante a
adolescencia unha pequena proeza persoal, parcialmente sumerxido nun
manantial e completamente desnud@, os demais botaranche gran cantidade de
auga limpa na cabeza ó mesmo tempo que pronuncian frases axeitadas a
situación; e no medio de toda a comunidade druida do lugar, unida en corro
polas mans, podes considerarte novo membro, si o ves oportuno.
5º.- Intentarás bañarte, sempre que poidas, nas
praias limpas do mar, nos rios, e lavarás as mans sempre que pases por
diante de fontes naturais. Todo contacto emocional coa Natureza fortalecerá
o teo espíritu acadando unha vida máis sana e armoniosa mantendo unha
emoción positiva ó longo das diferentes manifestacións e celebracións das
estacións do ano.
6º.- Podes admirar e cuidar os manantiais, fontes,
rios, regatos, cataratas, montañas, penedos, peñascos, páxaros e animais,
libres de toda contaminación que se lles poidera causar.
7º.- Os druidas vemos con agrado os vales, fragas
e árbores, reverenciando con especial atención os carballos e castiñeiros
ancestrais debaixo dos que se poden celebrar reunións, orxias, festas e
comer merendas. E vivenciarás ó muerdago e ó acivro como exemplo de
vitalidade xa que permanecen verdes incluso durante o inverno.
8º.- Manteraste máis saludable si fas sendeirismo
ecolóxico (deixando o coche, si se pode) indo a pé polos carreiros
naturais, podendo utilizar a bicicleta nos percorridos onde as condicións o
permitan. Sempre que sexa posible, o natural prevalecerá sobre o
artificial.
9º.-Procurarás comer e beber productos naturais: a
cervexa, o viño, a carne, o peixe, as froitas.. son productos naturais pero
perecedeiros polo que deben consumirse frescos e sin demora para que non
contaminen a Natureza e non ter que empregar conservantes químicos
perxudiciais para a saude.
10º.- Podes portar o triskel Celta de prata (con
xiro á destra) como símbolo do eterno rodar da Natureza e como
representación corporativa deste grupo filosófico-naturista.
Trisquel Dextrógiro
Los expertos sugieren que la forma espiral del trisquel marca el paso de
objetos celestiales importantes a través del cielo a lo largo de los años,
(una de las teorías favoritas, ya que daría utilidad a la figura del
triskel como calendario). Apoya esto el hallazgo de una mayoría de figuras
de triskeles dextrógiras (es decir, el sentido de la espiral es hacia la
derecha). Así como la esvástica, el triskele dextrógiro sería
"de buena suerte", en tanto que el triskele levógiro (el que se
dirige hacia la izquierda) sería de mala suerte. La razón de esto es sencilla:
en el hemisferio norte (de los drúidas), la sombra que traza un reloj de
sol se dirige siempre hacia la derecha, de manera que esa es la dirección
natural del tiempo; el sol se mueve hacia la derecha; la luna se mueve
hacia la dercha; todas las sombras del hemisferio norte, durante el día, se
iran girando hcia la dercha, luago, el giro opuesto a la izquierda sería
antinatural, algo que no admiten los drúidas. De la misma
forma, la sombra del gnómon (el puntero del reloj de sol) traza a lo largo
del año una serie de semicírculos concéntricos en la medida en que la
rotación de la tierra cambia la posición aparente del sol: un esquema que
puede haber sido el origen de los primeros trisqueles.
Pero también se puede apreciar en ciertos trisqueles el matiz de los
tres espirales que entran y salen en el círculo representando con estos dos
sentidos de giro la dualidad de las fuerzas (derecha-izquierda) que están
en permanente interacción en la naturaleza y por su número (el tres), el
equilibrio. El número de elementos que lo conforman es de de nueve (dos
veces tres espirales y tres círculos interiores) más el circulo exterior
conforman el diez, el número perfecto. El círculo exterior tiene la doble
cualidad de representar la totalidad y al tener inicio y fin es equivalente
al uroboro, la serpiente que se muerde la cola y que está en
renovación permanente.
Camilo Brandín Feijóo
Druidas/Celtas
Para entender a los druidas tal vez haya que entender primeramente el
contexto en que vivieron y se desarrollaron, es decir, la cultura celta.
Los celtas eran un pueblo foráneo al ámbito geográfico que actualmente
conocemos como Europa, y que se adentran en el continente hacia el siglo V
a.C. Esto queda constatado tanto por los textos de los autores clásicos
griegos y romanos, como por descubrimientos arqueológicos, los primeros por
hablarnos de este pueblo de origen indoeuropeo, y los segundos por hallar las
primeras manifestaciones de una nueva civilización de la Edad del Hierro de
la Europa templada, que se corresponde con bastante exactitud con los
territorios donde las fuentes históricas clásicas sitúan pueblos célticos.
Como todos los pueblos de origen indoeuropeo, los celtas han demostrado
tener no sólo un rígido sistema social, sino también una excelente visión y
concepto de las tareas sociales. César, quien conoció directamente a los
celtas de la Galia libre, define el sistema social de los celtas continentales
según un modelo de sociedad tripartita, que él mismo nos da con los
siguientes nombres: equites (caballeros), druis (sacerdotes) y plebs
(plebe). Salvo el nombre de druis, los otros dos están claramente
latinizados, evidentemente para pretender ser entendido por sus
conciudadanos. Pero, ¿por qué mantener el nombre de druis ? A mi juicio, se
debe al enorme prestigio y respeto que la casta sacerdotal tenía entre el
pueblo céltico, y a que llamaron poderosamente la atención de César, debido
al poder e inteligencia que demostraron poseer.
La palabra druida deriva del vocablo griego «δρυs». La
definición más antigua del nombre nos viene dada por Plinio, que nos dice
que los druidas toman su nombre de la encina «de la cual recogen el
muérdago, y comen las bellotas para adquirir sus facultades adivinatorias».
Sin embargo, diversos estudiosos han llegado a otra definición tal vez más
precisa. Relacionan drúi con súi, que significa «sabio»; su (=bien) o dru
(=fuerte), junto a la raíz verbal uid (=saber), entran en la composición de
nombres sacerdotales en las lenguas bálticas, germanas y eslavas. Según
esto, los druidas serían algo así como «los muy prudentes» o «los muy
sabios», y no «los hombres de la encina», como apuntaba Plinio.
Intentaremos definir las funciones de la casta sacerdotal celta, y así
entenderemos mejor su capacidad de influencia sobre el pueblo. Muchos
autores clásicos nos hablan de ellas: en Galia los druidas asisten a los
sacrificios, de los cuales en ocasiones son los propios sacrificadores (a
quienes Estrabón llama vates ), pero la principal de sus funciones
religiosas era la adivinación. La adivinación presupone que el druida entre
en trances y situaciones de arrebatamiento espiritual. Powell nos dice que
los «arrebatamientos, trances y el poder de metamorfosearse, todos ellos
indican la misma relación genérica entre el mago celta, sea cual fuese su
nombre, y el chamán de la religión nórdica euroasiática». Según nos cuenta
César, también tenían funciones jurídicas, ya que debían pronunciarse sobre
casi todos los litigios públicos y privados. Tienen cierta autoridad de
naturaleza política, que se ve claramente en Irlanda, donde, como ya he
dicho previamente, el rey no puede hablar antes de que su druida se haya
pronunciado. «Los druidas desempeñan el papel de educadores de la
juventud». Es obvio que sería ésta la faceta druídica más temida por César,
quien nos cuenta que a veces empujaban a sus discípulos al poder. Es ésta
una afirmación un tanto escabrosa, en primer lugar porque puede ser pura
propaganda política en contra de la casta druídica, y en segundo lugar
porque puede también ser cierto en algunos aspectos. Dejando libertad a
nuestro espíritu crítico, podríamos tomar ambas opciones como parcialmente
ciertas: no podemos negar la subjetividad de César, pero tampoco las ansias
de poder o influencia de algún que otro —sino muchos— sacerdote celta. Un
ejemplo claro es el hecho de que un aristócrata o noble podía ser educado
como druida.
¿Cuál es el motivo de que estuviesen tan arraigados estos cultos? El
carácter enormemente cohesionador que siempre había tenido el druidismo.
«El aspecto más interesante y más sorprendente fue la constitución del
sacerdocio de los druidas, la organización de una sociedad religiosa que
hizo del grupo de los pueblos celtas un pueblo coherente». El mismo Hubert
nos dice que «el estudio analítico y comparativo de la institución del
sacerdocio druídico, enseña que es esencial a la organización de las
sociedades célticas». Desde este punto de vista, parece obvio que los
druidas no tuviesen ninguna dificultad en ejercer cualquier tipo de
influencia sobre su pueblo. Pero es que, además, la historia nos muestra
claramente cómo el druidismo fue el último bastión de resistencia de las
sociedades célticas contra los romanos en Galia y en Britania, y frente al
Cristianismo en Irlanda, hecho que conocían y que temían los romanos, a
juzgar por las campañas que sus generales llevaron contra los santuarios de
Britania, y por la descalificación que sufrieron los druidas en Galia e
Irlanda.«Los viajes de los druidas, sus reuniones, cimentaban la unión de
los pueblos celtas y el sentimiento de su parentesco, del que su unidad
hubiera podido salir».
Y es que el druidismo fue una institución pancéltica, del mismo modo que
hubo deidades pancélticas gracias a esa enorme cohesión que fomentó el
druidismo entre las gentes celtas. Había druidas en Irlanda e incluso en
Britania, según nos cuenta César al hacer testimonio de su poder. Sin lugar
a dudas, tal y como nos cuenta también César, entre otros, había druidas en
Galia. No hay noticias, sin embargo, de presencia druídica en Italia,
España, Galacia y el valle del Danubio, aunque ello no es motivo para
descartar la posibilidad de su existencia.
Hay autores que señalan la adoración de muchos de los dioses pancélticos
en España, a saber, Lug , Esus , Tarannis , Teutates , algo difícil de
preservar de no ser por la presencia de una casta sacerdotal. Nos dice
López Monteagudo que «en la Hispania celta no se dio la existencia de una
clase fuerte sacerdotal como entre los druidas, aunque hubieran oficiantes
en los sacrificios». Ella misma nos señala que al igual que «en la Galia,
existió en toda el área indoeuropea de la Península Ibérica un culto muy
extendido a las aguas y también a los bosques, montes y piedras». Fe de
ello dan los autores clásicos, quienes nos hablan de cultos a la luna, a
las aguas y a los montes. Estoscultos son comunes a la práctica totalidad
del mundo céltico.
¿Qué papel ocupaba la magia en todo esto? Sabemos que eran hechiceros, y
los textos irlandeses medievales nos hablan en reiteradas ocasiones de sus
increíbles poderes. Le Roux y Guyonvarc’s hablan con cierto detenimiento de
las técnicas rituales y mágicas de los druidas. Se ocupaban, por ejemplo,
de los rituales funerarios y del bautismo. Este último es mucho más
interesante de lo que parece, pues el bautismo celta era muy posterior al
nacimiento. Cuando alguien nacía recibía un nombre provisional, hasta que
realizase una hazaña, algo extraordinario por lo cual pudiese adoptar otro
nombre que tuviese relación con dicha hazaña. Tal vez haya unxn--brandn-7va.es/a semejanza
entre esto y lo que hoy en día llamamos apodar, aunque este último no esté
en absoluto revestido del carácter místico de que estaba investido el
primero. Indudablemente, casi todos los guerreros —y algunos druidas—
buscarían realizar una gran hazaña. El pueblo celta consideraba esto como
algo mágico, pues como muy bien dice Powell «los celtas creían en poderes
mágicos que invadían todos los aspectos de su vida y su ambiente. Lo que
les interesaba por encima de todo, por tanto, era conjurar esos poderes
mágicos para fines benéficos. Esto se conseguía por medio de rituales y
sacrificios, y recitando mitos: aquellas leyendas sagradas que, según
creían, movían a las divinidades, por el pasado y por la memoria, a
satisfacer las necesidades de los mortales». Realmente era de nuevo una
treta druídica: los celtas creían que los druidas tenían poder sobre los
elementos naturales. La creencia en estos poderes nos ha quedado recogida
en los textos irlandeses medievales principalmente. Del mismo modo, la
niebla druídica estaba considerada como otro de los símbolos de su poder.
Era considerado como un estado intermedio entre el aire y el agua, y se
empleaba comúnmente, según la tradición, tanto por los seres del Otro Mundo
como por los druidas, para paralizar o impedir los movimientos de los
hombres. El feth fiada o don divino de la invisibilidad sólo estaba
permitido a los seres del Otro Mundo, a los druidas y a algún que otro ser
privilegiado. Finalmente, y cómo no, los druidas guardaban todo el saber
referente a la magia que habitaba en la propia naturaleza. «La magia
vegetal ha sido, evidentemente, muy importante en todo el mundo céltico».
Su importancia la demuestra todo el ceremonial que conllevaba la recogida
del muérdago con la hoz de oro druídica, y que nos relata Plinio, quien nos
dice que incluso se sacrificaba a un toro blanco. Hoy en día sabemos que
eso no es magia, sino cualidades especiales de ciertas hierbas, bayas, arbustos,
etc. De hecho, toda esa tradición pseudomágica ha quedado recogida por la
medicina actual. En aquel entonces era magia, y los druidas supieron, una
vez más, manipular esa creencia para su propio beneficio. Ejemplo de este
beneficio es que los druidas no pagaban ningún tipo de impuesto ni
realizaban el servicio militar, tanto los druidas ya formados como los
pupilos de éstos. Los mitos de los textos irlandeses nos hablan amplia y
repetidamente de esos poderes que los druidas obtenían mediante brebajes, pociones,
mezclas vegetales y por propia naturaleza.
Los druidas sabían cómo pedir ayuda a los dioses, cómo invocarlos y de
dónde y cómo sacar la magia que les rodeaba, al igual que conocían el
misterio de la ciclicidad de todos los seres y cosas del mundo. Esto les
hacía respetables y les permitía ser respetados por sus conciudadanos. Eso
era influencia. Ellos sabían cómo sacar provecho de todo esto, al igual que
han hecho siempre los sacerdotes de la mayor parte de las religiones del
mundo, si no todas Los druidas no fueron una excepción. Pero, ¿qué es eso
de la ciclicidad de todo lo existente? Una norma básica que rige realmente
toda la cosmovisión celta. Es un concepto religioso-espiritual. Un ejemplo
de ello nos viene dado, una vez más, por César, quien nos dice que los
druidas «esméranse sobre todo en persuadir de la inmortalidad de las almas
y su transmigración de unos cuerpos a otros, cuya creencia juzgan ser
grandísimo incentivo para el valor, poniéndose a parte el miedo a la
muerte». Esta noción de la inmortalidad del alma o metempsicosis, al
contrario de lo que creyeron ciertos autores clásicos al decir que su
origen estaba en los padres de la filosofía griega, lo cierto es que es
puramente celta.
Los druidas tenían una doctrina completa de esta inmortalidad, con una
moral, una visión general del mundo, una mitología, un ritual y ritos
funerarios apropiados. Enseñaban que la muerte no era más que un
desplazamiento al Otro Mundo, donde el alma reside como reserva necesaria
para cuando el mundo real necesite un alma para una nueva vida. «Pero por
otro lado, parece que el capital de almas no se halla limitado a la especie
humana y que las almas pasan por transmigración de una especie a otra».
Ahora bien, no hay que confundir metempsicosis con reencarnación en la
cosmovisión celta. Su concepto era algo más parecido a la inmortalidad del
alma, pero ajena a lapersona: el alma es lo que es, no por haber estado en
el cuerpo de una persona determinada, sino por la esencia de sí misma. Esta
creencia permitía al pueblo celta ser, como dijo Estrabón, aguerrido hasta
la locura.
En el campo de las artes, este concepto religioso puede ver su
representación plástica más interesante en el llamado triskele o triskelo ,
que tiene la forma genérica de una especie de hélice arqueada de tres
brazos. Algunos autores asocian esta figura ornamental, que era el símbolo
druídico por excelencia, con la triplicidad de las divinidades célticas,
mientras que otros no se atreven a opinar y lo dejan como un simple motivo
decorativo céltico de curvas y contracurvas. A mi juicio, el hecho de que
fuese el símbolo druídico debe tener alguna connotación simbólica en él
mismo. Sabemos que los druidas eran considerados como seres en una
plataforma intermedia entre los hombres y los seresdel Otro Mundo.
Posiblemente el triskele represente estos tres puntos: los hombres, los
druidas y los dioses del Otro Mundo. Aunque también es posible que
represente a los hombres, la tierra y el Otro Mundo, teniendo en cuenta su
estructura de cosmovisión. Tal vez nunca lleguemos a saberlo con entera
certeza.
El último aspecto que nos queda por tratar es el de la escritura. Los
celtas no escribían nada. Sólo en época medieval se atrevieron a plasmar
sus mitos y leyendas en escritos. ¿Por qué? . También es cierto que no
querían ni vulgarizar los conocimientos druídicos, ni que llegasen a
sabiendas de extranjeros o enemigos. Pero más cierto es aún que los druidas
querían preservar aquello que les convirtió realmente en una casta
privilegiada dentro del pueblo celta: sus vastos conocimientos, su magia,
los cantares de las gestas de sus héroes y sus dioses, el conocimiento del
modo de sacar provecho del poder divino y el poder de la naturaleza. No
querían que el pueblo llano, y mucho menos la nobleza guerrera, conociese
su escritura secreta, pues con ello hubiesen perdido mucho misticismo y
crédito. Sin todo esto, los druidas no hubiesen conseguido preservar su
poder por demasiado tiempo. El conocimiento de la escritura era el
auténtico poder. Eran ellos quienesrealizaban las transacciones comerciales
de su pueblo, pues conocían perfectamente caracteres griegos e incluso
latinos. Al igual que ocurriría en época medieval, el poder se hallaba en
la escritura, y los druidas lo sabían.
Toda su magia tenía explicaciones naturales, y ellos realmente lo
sabían. Ésta es su faceta más claramente humana. Sin embargo, no hay que
menospreciar en absoluto la labor que los druidas emplearon en beneficio de
su pueblo: les enseñaron, llevaron la civilización, hicieron de ellos un
pueblo grande y coherente, mantuvieron una cosmovisión perfectamente
entrelazada con sus ritos y creencias, mantuvieron el culto a unos dioses
que plagaban la totalidad del mundo que les rodeaba, y se empeñaron casi
ciegamente en mantener las costumbres, su historia, las leyendas y los
conocimientos que durante siglos y siglos se habían ido forjando entre su
pueblo.
Acepciones del druidismo.
El Druidismo es una filosofía que encuentra sus
raíces en la naturaleza misma, que busca la conexión del individuo con (1)la
tierra, (2)el cielo y (3)el mar, los tres reinos de la cosmovisión celta.
Es un camino de reflexión sobre las preguntas que surgen en nuestra mente y
espíritu, tratando de encontrar las respuestas y el crecimiento personal en
la sabiduría y enseñanzas celtas, es sus tradiciones y folklore, su
mitología y sobre todo, en las lecciones que la naturaleza misma como un
ente vivo y radiante nos puede dar.
Como religión, es un intento de reconstruir, dentro de un contexto
cultural moderno y sin anacronismos, las religiones Célticas pre-romanas.
Por medio del estudio de las fuentes académicas que en historia,
antropología, filología y en general estudios de los viejos manuscritos,
folklore, y tradiciones; que han llegado hasta nuestros días, combinando
esta información con práctica mística, vivencial y espiritual. Tratando de
llevar la cosmología de los pueblos celtas al presente, adecuándola al aquí
y ahora.
Como actividad cultural y académica, el Druidismo ha estado ligado
constantemente con los centros de estudios celtas que existen
principalmente en el Reino Unido e Irlanda; con actividades artísticas especialmente
en el ramo de la poesía y la música, al ser estas dos actividades de suma
importancia en la tradición druídica; y en general las actividades
culturales relacionadas con el legado Celta en el mundo moderno.
Dado que el Druidismo es un camino espiritual sin dogmas y una religión
sin jerarquías, no existe un único camino Celta, ni existe una única
definición, esta variará de acuerdo a cada persona y como esta viva su
espiritualidad. El Druidismo es un camino vivencial, que no puede ser
plenamente entendido si no se vive. Sin embargo, al estar basada en un
sistema religioso y una cosmovisión particular, hay puntos base sobre los
que cada persona deberá trabajar interior y exteriormente al recorrer este
sendero.
La forma más común de clasificar el Druidismo ha sido en dos ramas
principales, que es el Druidismo Ecléctico o Revitalista y el Druidismo
Celta o Reconstruccionista.
El Druidismo Ecléctico tiene sus orígenes en la figura de Iolo
Morganwg, Aubrey, Stuckeley y otros que han sido llamados los revitalistas
románticos del siglo XVIII, dando lugar a su forma moderna
El Druidismo Celta tiene sus orígenes en el druidismo ecléctico
pero tomó un camino diferente alrededor de 1980, como un intento de
entender lo que los hallazgos de la arqueología y antropología tenían que
decir sobre los celtas y que, muchas veces, tiraban los mitos sobre los que
se construyó el movimiento del siglo XVIII. El movimiento de paganismo
celta trata de incorporar esos hallazgos y hacer de su conexión espiritual
algo ligado con los celtas pre-romanos. Como una forma de legitimizar su
religión y prácticas.
Pero ciertamente, todo hay que decirlo, el Druidismo es una práctica
relativamente nueva, se podría argumentar que con 300 años de existencia,
sin embargo, aún así es una religión/filosofía que surgió (o resurgió) hace
poco. Y es difícil poder argumentar que la manifestación moderna del
Druidismo vaya más allá de 1964.
“La Arboleda Sagrada”
Lubre:
Es un espacio libre, en medio de los bosques frondosos, donde se reúnen
los drúidas celtas para celebrar sus ritos y asambleas a la luz de la luna.
Es un lugar tranquilo y sereno, apartado del mundanal ruido, donde los
celtas contactan con la placidez y tranquilidad de la Madre Naturaleza.
Como las legiones romanas tuvieron muchas dificultades para someter a todos
los pueblos celtas, algunos historiadores romanos, para difamar y
desmoralizar a estos pobladores, llagaron a difundir infamias tales como
que los druidas sacrificaban a niños en estos lugares de culto. Y por
idénticos motivos, la iglesia católica también siguió atribuyéndoles esta
misma infamia al resistirse estos a aceptar las creencias cristianas frente
a sus tradiciones de amar a la Madre Naturaleza, sus bosques, sus ríos, o
sus montes. Esta técnica de desprestigiar al que no se somete ha sido utilizada
con frecuencia, no solo a lo largo de la historia, sino también para
desprestigiar a aquellos con los que no puedes competir. En contra de todo
esto, en los lubres, lugares sagrados, no solo no se practicaban tales
barbaridades con los niños, sino que los drúidas siempre fueron los más
dignos defensores del orden natural y, por consiguiente, del cuidado de la
paternal protección de sus hijos.
Los Druidas Celtas y el Muérdago.
Los
druidas celtas eran silvícolas por excelencia, es decir, cultivadores de
los montes y bosques, y fervientes adoradores de bosques
y árboles. Testigo de esto son los boques que encontraron los romanos
en sus invasiones, como la Selva Negra, en
el Suroeste de Alemania, sitios de verdadero culto a las divinidades
forestales. Entre los celtas, el roble era el árbol sagrado por excelencia,
sobre todo si tenía el muérdago, una planta parásita que
era objeto de particular veneración. La recolección del muérdago daba lugar
a interesantes ceremonias, que ya describió Plinio el Viejo (23-79 d.C) en el libro nº
16 de su Historia natural. Entre
los druídas (sacerdotes de los celtas), nada era más sagrado que el
muérdago y el árbol a que éste estaba adherido, especialmente si era un
roble, el cual escogían con preferencia para poblar sus bosques
sagrados, y no practicaban ceremonia religiosa alguna sin la presencia de
sus ramas. El muérdago criado en la corteza de un roble, era mirado a
modo de un enviado celestial y como una señal de la elección que Dios mismo
había hecho del árbol.
Pero, encontrar el muérdago
adherido a un roble era un fenómeno poco frecuente, y al hallarlo se
le recogía con gran ceremonial. Ante todo, se había de coger en el sexto
día de la luna, día que era el comienzo de sus meses, de sus años y de sus
siglos, que duraban treinta años; día en el que la luna, aunque no en la
mitad de su carrera, estaba ya en la plenitud de su fuerza y al que daban
un nombre que significa remedio universal. Una vez preparado debajo del
árbol todo lo necesario para los sacrificios y para un banquete, traían dos
toros blancos, a los que se les ataban por primera vez las astas, entonces
subía al árbol un sacerdote vestido de blanco y cortaba con una podadera de
oro el muérdago, el cual caía en una saya blanca; luego se inmolaban las
víctimas. En su tiempo, era una creencia común que el muérdago, tomado
en bebida, daba la fecundidad a los animales estériles (por su verde
perenne) y servía de remedio contra toda clase de venenos.
Propiedades Curativas
del Muérdago
Actualmente también se utiliza con fines
terapéuticos. Pero conviene administrarlo únicamente bajo prescripción y
supervisión médica, ya que tomada de forma errónea o, dependiendo de las
dosis, puede ser tóxico e incluso letal. Por ejemplo, las bayas de
muérdago no deben ingerirse, ya que producen alteraciones nerviosas y
cardíacas muy graves. Lo que se utiliza es la raíz, las hojas y
las ramas jóvenes. También hay que recordar que es una especie
protegida así que no se puede recolectar sin verdaera necesidad. Se utiliza normalmente en forma de infusiones
e inyecciones.
·
Regula el ritmo cardíaco, es
cardiopática, vasodilatadora coronaria y evita la creación de ateromas, se
usa en arteriosclerosis, palpitaciones, mareos, etc.
·
Es antiepiléptico y antirreumática.
·
Regula la Hipotensión.
·
Atenua la Fibromialgia y el Tinnitus
(zumbidos en los oídos).
·
Su aplicación más espectacular está en el uso de
extractos de muérdago para el tratamiento de tumores malignos. Se considera que activa la timo y por tanto reactiva el
sistema inmunológico.
·
Se usa también como reconstituyente y para mejorara
las defensas.
·
En cálculos en la vesícula,
alivia la firbre y mejora la retención de
líquidos.
Riesgos y Efectos Secundarios
.- Sus
bayas son muy tóxicas, por ello debemos tener mucha precaución, se
recomienda ingerir solo productos de fitoterapia ya preparados
correctamente.
.- Se debe
consumir en dosis bajas, a dosis altas es tóxico cardiaco provocando
bradicardia e incluso parada cardíaca.
.- No tomar
en caso de embarazo, lactancia o en niños. También en enfermedades
hepáticas severas.
.- Prestar especial
cuidado en sus aplicaciones..
No
confundir con el Acebo (falso muérdago)
Druida Celta e
Peliqueiros, símbolos liberados das normas da Relixión Tradicional.
Un restaurante Druida, onde se beben e comen saborosos
manxares da Natureza, sen contaminar.
|